miércoles, 27 de agosto de 2014

SÓLO AQUÍ EXISTO

Ahora la vida se me presenta como un momento sostenido,
carente de expectativas,
donde ya no tiene cabida el éxito y el fracaso,
el acierto o el error.
Todo son sensaciones que golpean,
y el día se me presenta hueco de pasado,
y vacío de intención;
sólo existe mientras yo lo creo.
Mientras lo vivo.
Desaparece al instante sin rastro,
sin memoria,
sin podría haber sido.
El día va muriendo mientras nace,
en una explosión de certidumbre,
que se desvanece apenas lo voy viviendo.
He perdido para siempre la capacidad de proyectar.
Voy ganando segundo a segundo la intensidad de vivir.
Me invade el vértigo de la plenitud insondable del momento consciente.
En ese marco trabajo.
Sólo aquí existo.
Fuera de él no hay nada.
Nunca hubo nada.
Y no habrá nada.
Si vivimos fuera del instante preciso.
No vivimos.
Nos desintegramos en pasado y en futuro.
Y desaparecemos para siempre de este presente único,
irreversible.
Ya perdido para siempre.







No hay comentarios:

Publicar un comentario