domingo, 22 de marzo de 2015

VIAJE INTERIOR

Te reconoces vacío
y viene el miedo.

Observa:
el universo estaba dentro ti,
porque eres espejo y fuente de todo.

Ahora desnudo, 
sin ley y sin moral,
te relativizas.
Sin el rumbo del juicio,
sin temor a la condena y al premio;
navegas sin penitencia y vanidad.
Ahora viajas hacia tu Ítaca,
la nada,
sin el mapa de las expectativas
y sin cíclopes ni lestrigones;
cómplices
para no estar aquí y ahora.

Pero nada hay que buscar,
nada hallarás fuera de ti;
fuera de este segundo
que comprendes.

La desintegración del espejismo
dejó el vacío,
y sentiste en la noche 
la inutilidad de los abrigos;
al frío de tu autoimagen inventada.

Sin vestidos prestados 
y sin intermediarios,
génesis y muerte se tocan;
a pesar de la carne y los huesos,
libre de gusanos y tierra,
comprendes al fin quién eres:

Nadie hacia nada....








No hay comentarios:

Publicar un comentario