jueves, 26 de febrero de 2015

MIS HIJOS SIN MÍ


Destruido el ego,
he mirado a mis hijos
con una mirada nueva.
Han aparecido libres de mí,
gigantes de luz,
quizá más viejos que yo,
y más sabios.
Yo solo soy su padre.
Ellos aprenden de mí
unas cosas y yo aprendo otras.
Pero si es verdad
que daría mi vida por ellos.
Por otra parte,
eso ya
lo hacen muchas otras especies.
He mirado a mis hijos
con una mirada nueva.
Para verlos enteros,

                                         me he retirado.

Me olvidé de mis miedos
y de mis deseos.
Me he ocultado
sin proyectarme en ellos,
libres de mi ojo;
saturado de mí.
He mirado a mis hijos
con una mirada nueva.
Antes tuve que mirarme a mí mismo,
libre de mi ojo.



No hay comentarios:

Publicar un comentario