sábado, 4 de enero de 2014

UN MUNDO NUEVO

Cuando vuestras pupilas se me clavan en mis ojos desde fuera,
retumbo hacia dentro de vosotros,
porque mi ojo  también vive dentro de vosotros.
He de daros salida pronto,
antes de que matéis mi cuerpo.
Porque Yo soy vosotros y
Vosotros soy yo.

Somos el árbol de las siete mil millones de raíces,
que bebe de la única sangre disponible.
Nuestros ojos están vueltos del revés,
mirando a nuestros propios ojos.
No hay nada, ni habrá nada nuevo bajo el sol.
El mismo viento eterno mece nuestra alma y
la misma madre tierra de carne somos.
Del mismo pozo eterno brota la savia
que recorre nuestro cuerpo.

Cuando alguien muere; un trocito de cada uno muere.
Cuando alguien ama; un trocito de nosotros ama.
Cuando alguien odia; un trocito de nosotros odia.

Al morir nos alimentaremos a nosotros mismos para nacer de nuevo.

Resucitaremos en un nosotros distinto.

Cuando al fin,
hayamos todos y cada uno de nosotros,
comprendido...











No hay comentarios:

Publicar un comentario